¡Cambiamos de dormitorio! cama de 180 cm y cabecero molón a medida

Confieso que no lo veía claro y jamás pensé que el cambio fuera a ser tan radical como ha sido. Pero marido estaba empeñado: quería pasar de la cama de 160 a una de 180 cm. Hace más de un año que nos mudamos a la casa nueva, conocida como “Villa Molona”, y poco a poco la estamos dejando a nuestro gusto. Tenía ganas de poner un cabecero molón y darle un toque más nórdico y menos romántico a nuestra habitación. Pero, antes de dar ese paso y elegir uno, teníamos que tomar la decisión: cambiar el tamaño de la cama, ¿sí o no?

Él lo veía clarísimo y al final me convenció. ¡De perdidos al río! Lo reconozco, después de casi dos meses de uso, puedo decir que el cambio ha sido la bomba, es verdad que echo un poco de menos a marido jaja… pero es una pasada dar vueltas como una croqueta y no chocarse con nadie. Y eso de que aparezca la molona (4 años) a las 3 de la madrugada y poder dormir con ella en medio sin molestar, también es un punto más que a favor. Vamos que ha sido un gran acierto y ya me visualizo en breve disfrutando de mis largas noches de lactancia con espacio de sobra para mi cuna de colecho a un lado y un nido de estos que están tan de moda a mi otro lado, sin incordiar a marido.

El cabecero de mis sueños

Una amiga decoradora, Nuria Marín, me pasó una foto de esas que salen por pinterest y cuyo origen es imposible conocer. Automáticamente me enamoré de esta idea y la colgué en instragram en busca de ayuda para localizar esa preciosez y hacerme con una para mi casa. Aquí os dejo la foto de autoría desconocida:

Después de compartir la imagen, recibí un mensaje de Toni, un crack que se dedica a hacer dormitorios increíbles para niños y que me dijo que él podía hacerme el cabecero y, ojo, mejorármelo. ¡Toma ya! así me gusta la gente, con las ideas claras. ¡Gracias internet de mis amores por cruzar a este artista en mi camino!

Aunque el hecho de que estuviera en Mataró, a más de 600 kilómetros de nuestra casa, nos daba cierto reparo, nos liamos la manta a la cabeza y decidimos encargárselo a él, además de sumarle un par de mesillas para que fueran a juego. Ahora puedo decir con orgullo que ¡hemos acertado! La experiencia con Toni ha sido de diez.

Proceso:

• Primero le mandamos las medidas de la habitación, contando con rodapiés, puntos de luz, etc.
• Nos preparó un 3D muy molón para ver cómo quedaría y también explicarnos el montaje paso a paso
• Además, me fue mandando fotos de las pruebas de color de la madera

Vamos que las distancias para nada han supuesto un problema en este proceso.

¡Y dicho y hecho! hace un par de semanas nos llegaron el cabecero desmontado y las mesillas montadas y bien embaladas. Marido pidió refuerzos (suegro molón que es muy manitas accedió) y ahí estuvieron todo el domingo hasta dejarlo instalado. Hay que tener en cuenta que iba de lado a lado de la pared y que tenía que tener un pequeño espacio entre la pared y la cama para dejar una mini repisa arriba donde pretendo colocar algún objeto decorativo. De ahí que el montaje llevase algo más de tiempo que el de un cabecero normal.

Aquí tenéis imagen del proceso:

¡Y tachán! este ha sido el resultado:

Podéis visitar la página web de Toni pinchando aquí y seguir su cuenta de instagram en este otro enlace. Estoy segura de que sus trabajos os van a sorprender, de hecho os estoy preparando un post muy completo para que veáis las decoraciones infantiles que hace. En cuanto a precios, varían tanto dependiendo de la necesidad de cada cliente, que lo mejor es que le contactéis para consultarle directamente.

Volviendo a mi dormitorio, ahora solo falta meterle diferentes detalles decorativos en la repisa superior del cabecero e incluso en la pared, en este punto, ¡os pido ayuda! si se os ocurren ideas molonas, láminas bonitas que puedan ir apoyadas en el estante, así como otros elementos decorativos, estaría súper agradecida de conocer vuestras sugerencias. Como veis en las fotos, alguna cosita he puesto pero bueno, seguro que vosotras tenéis muy buenas ideas 😀

Cambio de tamaño, cambio de ropa de cama y de relleno nórdico

Y, con el cambio a 180 cm, nos ha tocado cambiar de nórdico y comprar una funda que sobresalga y no quede corta. Para ello hemos optado por la tienda Burrito Blanco después de haber leído varias opiniones muy positivas de esta tienda. El juego de cama que veis en la foto es absolutamente amoroso, blanco y sencillo, justo lo que yo quería; acostumbrados a fundas de ikea, la verdad es que la diferencia en el tacto se nota una barbaridad.

En cuanto al nórdico dudamos mucho porque queríamos algo que no nos diera calor pero con el que tampoco pasar frío, que fuera transpirable y limpio. Al final pedimos consejo directamente a atención al cliente de esta misma tienda y optamos por dos modelos que se pueden usar juntos o por separado. Por un lado, el modelo Confort de 100 grs para los meses donde no hace frío. Y el modelo Confort de 250 grs para los meses de frío: además, cómo tienen cierres de unión, se pueden usar conjuntamente para aumentar el poder calorífico para los días más crudos de invierno.

Los dos nórdicos están elaborados con un tejido 100% de algodón, con relleno de fibra hueca hipoalergénica siliconada que permite la circulación del aire y que, además de aislar del frío, transpira. Tengo que decir que estamos súper contentos, por ahora solo hemos usado el de 100 grs y realmente cumple con lo prometido, (y mira que marido y yo somos muy especiales: él muy caluroso y yo friolera… ya veremos en los meses fríos cómo lo llevamos).

Puntos de luz

Antes de que me preguntéis, los apliques que van en el cabecero los compré hace un montón y estaban agotadísimos. Tuve que esperar como 3 meses a recibirlos y luego dudamos mucho porque no nos pegaba con la anterior decoración, menos mal que no me deshice de ellos porque ahora me parece que van fenomenal con el nuevo mobiliario.

He rastreado mi mail para deciros la tienda en la que los compré y no lo encuentro por ningún lado 🙁 ¡mil perdones! eso sí, donde sí lo he encontrado es en amazon, os dejo enlace directo pinchando aquí por si os interesa 😉

¡Y esto es todo! el colchón, el somier y las alfombras son de ikea, el banco que está frente a la cama es de una tienda de decoración pero lo compré hace años y no os sabría decir la referencia. Ojo porque de los colchones de ikea he oído de todo, malas y buenas experiencias, en nuestro caso elegimos uno muy firme, como el anterior a este, y estuvimos 5 años muy contentos; pero bueno, es solo nuestra experiencia.

¿Qué os parece el resultado?, ¿os gusta o sois más de otro estilo?, no olvidéis dejarme aquí abajo vuestras impresiones y, si alguna quiere darme ideas decorativas, ¡bienvenida sea! sobre todo para textiles, cojines monos y para los detallitos de la repisa.

¡Gracias molonas! que tengáis un día muy molón y, recordad, os espero en instagram muy activa, ya sabéis que de lunes a viernes os doy los buenos días en los saludos mañaneros a través de instagram stories.

¡Feliz día!