Rollitos dulces con cremosa mermelada de melocotón

En mi continuo intento de ser una madre molona y hacer lo imposible para que niñamolona no vea la tele en los días que el tiempo no acompaña, encontré una receta estupenda para preparar con niños. Así que llamé a madre veterana y ella y sus molones se apuntaron al plan. Tras una tarde muy divertida hoy comparto con todos vosotros nuestro gran descubrimiento porque, aunque la receta está inspirada en otras que ya existen, la hemos tuneado a nuestro gusto y ha quedado de muerte.

Para ello hemos aprovechado un tarro de mermelada de La Vieja Fábrica Cremosa que acaban de sacar al mercado y que nos ha conquistado. ¿Por qué digo esto? porque, aunque sigue su receta tradicional, tiene la particularidad de que es extremadamente cremosa, no tiene tropezones, ni siquiera semillas y los niños no podían parar de chuparse los dedos. De hecho una de las hijas de madre veterana es “antimermelada” y alucinamos con cómo relamía el plato jajaja…

Tomad papel y boli porque tenéis que probar estos rollitos.

Ingredientes

• Pan de molde (si es sin bordes, mejor)
• Queso de untar
• Mermelada La Vieja Fábrica Cremosa de melocotón (o del sabor que más os guste, lo hay de fresa, frutas del bosque, mango y ciruela)
• Un huevo
• Aceite o mantequilla
• Canela

Lo divertido de esta receta es que los niños participen en la elaboración. Por eso nosotras les pusimos el delantal y les asignamos distintas tareas. Vamos con el paso a paso:

1. Como nuestro pan tenía bordes, lo primero que hicieron fue quitarlos con cuidado (y comérselos ya de paso, jeje).
2. Con un rodillo aplastaron cada rebanada. Lo ideal es que queden finitas pero sin romperse.
3. Untar con queso y a continuación, echar la mermelada.
4. Enrollarlo con cuidado.
5. Batimos un huevo y empapamos cada rollito antes de pasarlo por la sartén.
6. Pasar a fuego medio hasta que queden doraditos.
7. Espolvorear con canela y ¡chimpún!

¡Más fácil imposible! y de verdad no sabéis lo buena que quedó la merienda, lo vistosa y lo rápido que se zamparon todos los rollitos. El último lo tuvimos que partir para que no se pelearan, con eso os digo todo. Con el emplatado aquí mi amiga la veterana y servidora nos vinimos arriba y “pintamos” el plato con un toque de mermelada, cuánto daño está haciendo Master Chef a nuestra generación, jajaja…

Os dejo recopilación de fotitos para que veáis lo bien que lo pasamos y la pintaza de nuestros rollitos.

Gracias madre veterana por tu ayuda y gracias a La Vieja Fábrica por dejarnos probar esta exquisitez de mermelada.

¡Hasta aquí el post! ¿os animáis a probar con vuestros molones?

¡Nos vemos en Instagram, Facebook y Twitter!