Cumpleaños temático “Bajo el mar”

Lo confieso, cuando niñamolona me dijo que quería una fiesta de cumple inspirada en “La Sirenita” casi me da un parrús… ¿cómo leches iba a ponerle un disfraz de sirena y evitar que acabase andando como un pingüino? El segundo problema al que me enfrenté fue a la falta de tiempo; con la reforma de la nueva casa “on fire” y todo lo que conlleva, más el trabajo, ser bimadre… ufffff… no me veía yo capaz de conseguir una fiesta molona para mi niña, cosa que me daba pena teniendo en cuenta que era el primer cumple en el que iba a ser realmente consciente de todo y que lleva meses obsesionada con su cumple.

Para este fin apareció mi salvadora: Andrea de Mimos y monas; decir que es una artista como la copa de un pino es quedarme corta. Desde el minuto uno su implicación ha sido absoluta y su único objetivo ha sido preparar una fiesta increíble como si fuera para sus propias hijas. Con inspiración directamente traída de Brasil, donde ha vivido y se ha empapado de este tipo de decoraciones, se puso manos a la obra para hacer una fiesta de La Sirenita única, inédita, preciosa e increíble. No perdáis detalle, saqué la cámara buena y no podía parar de hacer fotos:

Andrea llegó como a las 11:00 de la mañana del sábado de autos y se puso manos a la obra junto con su ayudante de excepción (su marido). En una hora -o puede que algo más- terminaron. Contraté solo los dulces, de los salados nos encargamos las abuelas, el padre de la criatura y servidora, no fue tan bonito, ni espectacular pero oye, no puedo desmerecer la tortilla de patatas de mi suegra 😉

Aquí tenéis más detalles de los cakepops, mini brownies, las chuches, bombones con formas marinas, etc.

Y la joya de la corona fue la tarta, ¡preciosez donde las haya! ¡y totalmente a juego con el vestido de niñamolona!

Uno de los detalles que más me gustaron -y mira que es difícil elegir- fueron las galletas de caballitos de mar y las conchas rellenas de conguitos blancos. Me parece una idea guay que los niños y la familia se pudieran llevar un recuerdo (aunque se lo comieran por el camino de vuelta a casa), del resto de conguitos sobrantes ya me encargué yo… madre del amor cómo me puse… ¡empacho total!

A las que me habéis preguntado por el vestido de niñamolona, es de la tienda Disney Store, desde luego tienen auténticas maravillas en cuestión de disfraces y este, la verdad sea dicha, fue más que apropiado para evitar recurrir a la temida “cola de sirena” y que la pobre no hubiera podido jugar y divertirse.

Desde luego su cara lo dice todo, no se lo pudo pasar mejor, tan, tan, tan bien que se olvidó de la quemadura que se hizo en el antebrazo justo antes de que empezase la fiesta. Menuda faenita gorda pero bueno, ya pasó y lo importante es que ella está bien y que se lo pasó en grande, ¡como debe ser!

Sin más dilación me despido, agradeciendo el trabajazo realizado por Andrea. Y os digo una cosa, creo que el bautizo de niñamolona -que me lo curré que no veas- me salió más o menos por el mismo precio pero con el doble de horas de trabajo por mi parte. Si no sois muy apañadas -o no tenéis tiempo- y no queréis renunciar a celebrar una fiesta muy molona os recomiendo con los ojos cerrados que confiéis en Mimos y Monas, yo lo haré de nuevo sin lugar a dudas.

¿Qué os ha parecido?, ¿os ha gustado?

¡Que tengáis un día muy molón! nos vemos en Instagram, Facebook y Twitter.